sábado, 29 de mayo de 2010

Vuelta con los dos brazos sin soltarse

Llamamos enlaces de brazos a los giros que la chica realiza delante del chico mientras éste la sujeta por ambos brazos. En una vuelta una de las manos de la chica permanece libre, pero en los enlaces las dos están cogidas a las de la pareja todo el tiempo si bien al menos una de ellas ha de rotar para permitir el giro.

Aunque las tres posibilidades básicas de enlace son muy sencillas, este es un tipo de movimiento con multitud de variantes lo que puede dar lugar a importantes "líos" en la pista de baile. No tenemos espacio aquí para ocuparnos de todas ellas pero ten en cuenta que el chico puede hacer los mismos enlaces que la chica, que todas las posiciones enlazadas tienen dos salidas (por arriba y por abajo, agachándose), que se pueden hacer con los brazos en posición cruzada y que se pueden combinar entre sí y con las vueltas a una mano. En todo caso, los enlaces de brazos sólo se pueden hacer en la posición baja de baile.

LOS TRES ENLACES BÁSICOS

Cuando nos disponemos a "enlazar" a la chica tenemos tres opciones según la forma en que dispongamos los brazos. Si levantamos los dos brazos el resultado no es muy distinto de una vuelta a una mano excepto que los brazos quedan trabados y hay que deshacer la posición de inmediato. También podemos levantar sólo uno y dejar el otro abajo y en ese caso se dice que la chica queda "envuelta" y hay dos posibilidades según hayamos llegado a la posición mediante un giro por detrás o por delante. Antes de examinar con mayor atención estos tres enlaces básicos queremos recordarte que la nomenclatura que utilizamos es propia y que es posible que en otros sitios encuentres los mismos movimientos bajo nombres diferentes:

  • Vuelta a dos manos: Es la posición resultante de dar una vuelta a la chica mientras se mantienen sujetas ambas manos. Puede hacerse por cualquiera de los dos lados pero siempre hay que hacer una por cada lado para destrabar los brazos.
  • Envolver delante: Posición resultante de dar una vuelta por delante a la chica manteniendo sujeta por abajo la otra mano. Puede hacerse a ambos lados e incluso utilizarse para bailar un rato. La chica no está a la misma altura que el chico sino ligeramente delante. En esta posición las indicaciones se hacen con el brazo situado en la espalda de la chica, no con el que la abraza por delante.

  • Envolver detrás: Se obtiene al dar a la chica una vuelta por detrás mientras se sujeta abajo la otra mano. Puede hacerse a ambos lados y utilizarse para bailar un rato. Las indicaciones se hacen con la mano pegada a la espalda de la chica que ha de girarse hacia ella. Hay que procurar evitar la rigidez excesiva en los brazos "libres".
Para que un enlace salga bien y con limpieza no basta con levantar un brazo o dar un tirón para que la chica gire. En un enlace la distancia entre la pareja en el momento del giro es tan importante como la indicación de ahí que la mejor solución sea "mover" a la chica para asegurarnos que esté lo bastante cerca.

El procedimiento consiste en tirar de la chica con ambos brazos atrayendola hacia uno de los costados en un desplazamiento que sería diagonal con respecto a su posición de salida. Una vez que la chica empiece a moverse, basta con que el chico levante uno o ambos brazos para completar cualquiera de los tres enlaces. Con la chica desplazándose todos los movimientos de brazos son mucho más sencillos de indicar y también es más fácil girar, así que todo son ventajas.





HAY QUE MOVERSE AL GIRAR
Un concepto clave del baile de salón es que en las vueltas abajo hay que desplazarse en diagonal. En este ejemplo puedes ver como la chica inicia el enlace en un sitio y lo termina en otro despues de moverse más de un metro. El gesto del chico volviéndose hacia ella, lo que en el argot se llama "encarar", también es muy importante.

martes, 25 de mayo de 2010

Vueltas de la chica (2º parte)

Sea cual sea la posición de los brazos o la postura de baile las vueltas de la chica son siempre iguales y no hay más posibilidades que las que ya estudiamos anteriormente, de modo que no volveremos a repetir aquí toda esa información. Nos limitaremos pues a los detalles específicos para las vueltas abajo que se refieren a la forma de indicarlas y girar las manos y a los desplazamientos que hacen los dos miembros de la pareja durante las mismas.

Sólo una última aclaración antes de empezar. Recuerda que anteriormente, vimos que había hasta tres posturas bajas de baile diferentes. No te líes con ello: todas las indicaciones que vamos a dar se refieren exclusivamente a la postura clásica o de gancho (las otras tienen sus propias técnicas de giro de manos y esta información no sirve para ellas).

EL BRAZO DE GOMA

En la postura de gancho todas las vueltas se indican con el brazo izquierdo del chico sobre el derecho de la chica. Evidentemente también se podrían hacer con el otro pero en el baile de salón dicha posibilidad no se contempla hasta los niveles más avanzados con el objeto de simplificar el aprendizaje.

La técnica de indicación de las vueltas abajo se basa en la idea de que los brazos están "duros" abajo en la posición de baile y "blandos" arriba, durante las vueltas y los enlaces. Si se cumple este requisito, la indicación no puede ser más sencilla: basta con que el chico dé un tirón del brazo de la chica en la dirección que quiera que gire y que a continuación afloje el brazo, situándolo por encima de su cabeza en una posición más o menos "redonda", sin ángulos ni posturas rígidas. El brazo de la chica también debe adoptar la misma disposición.

Una vez más queremos recordar que no sirve de nada mover el brazo alrededor de la cabeza de la chica para intentar que gire más rápido ("remover la perola", en el argot). La chica gira por si misma; lo único que hace el chico es indicarle la dirección. Para indicar una vuelta más veloz lo que hay que hacer es aplicar un empujón más fuerte y corto.

De lo que sí debe preocuparse el chico es del problema de girar las manos mientras la chica está dando la vuelta. Al estar cogidos en gancho es la mano del que dirige la que debe girar dentro de la de la pareja, al contrario que en la postura alta de baile. Para facilitar la rotación de los dedos es conveniente que el chico deje sólo dos (el índice y el medio) en el interior de la mano de la chica durante la vuelta. Aunque el encargado de esta tarea es el chico, la chica debe contribuir sujetando los dos dedos con la suficiente fuerza como para que no se suelten en un giro rápido.

GIRANDO ALREDEDOR DE LA CHICA

La otra característica específica de las vueltas abajo es el desplazamiento del chico alrededor de la chica durante la ejecución de éstas. En las vueltas arriba el chico permanece todo el rato en el mismo lugar con objeto de servir de referencia pero si hiciera lo mismo en la postura baja de baile quedaría muy soso y estático...

El desplazamiento del chico en las vueltas abajo es siempre en dirección contraria a la del giro de su pareja, con el objeto de "interceptarla" antes de que complete la vuelta. Esto facilita mucho la labor de la chica (que se marea menos) y dinamiza extraordinariamente el baile, dotándolo de mayor movilidad. La cantidad de vuelta que le "coma" el chico a la bailarina depende del baile y de su propia velocidad de desplazamiento pero en general oscilará entre un cuarto y media, que es el máximo. De hecho cuando el chico es capaz de alcanzar a la chica a mitad de vuelta ya no se puede decir que técnicamente gire alrededor de ella sino que ambos intercambian sus posiciones, en lo que es el típico giro de lado a lado del rock'n'roll, llamado vuelta hecha y deshecha en el baile de salón.

La clave para que los desplazamientos del chico salgan bien es que los inicien unas décimas de segundo antes de indicarle la vuelta a la chica. Haciéndolo así conseguirá avanzar más y hará un preaviso muy efectivo de la dirección en que será la vuelta ya que la chica se dirigirá instintivamente hacia el espacio que deje libre al moverse.


Truco

En las vueltas abajo, la que da problemas
con la rotación de las manos, es la vuelta por detrás o por la derecha. Para evitar que se traben los dedos,el chico debe realizar un pequeño giro de la muñeca hacía sí al empezar la vuelta (como si quisiera ver la hora en su reloj) y en dirección contraria a continuación, todo ello sin sacar los dedos de la mano de la chica en ningún momento

sábado, 22 de mayo de 2010

Vueltas de la chica (1º parte)

Llamamos vuelta de la chica al movimiento que consiste en que la chica gire delante del chico sin que éste se mueva. La dirección de una vuelta queda determinada por la rotación de los hombros del que la ejecuta: si su hombro derecho gira hacia detrás, la vuelta será por la derecha; y si es el izquierdo el que lo hace, diremos que es una vuelta por la izquierda.

En la postura alta de baile la chica puede realizar 3 vueltas principales: por detrás, por delante y hecha y deshecha. Esta forma de nombrarlas responde al modo en el que las ve el chico, ya que para la chica serían vueltas por la derecha o la izquierda. Pasemos a describir brevemente las tres vueltas:

  • Por delante o por la izquierda:En principio es igual que la anterior pero tiene varias dificultades extra: para indicarla conviene bajar un poco la mano (hasta la cadera de la chica) ya que hay que empujar a la chica hacia fuera y es más fácil que la chica lo note si empujamos ligeramente desde delante; además la rotación de las manos es más trabajosa, aunque se realiza exactamente igual.


La vuelta por delante, se llama asi porque al ejecutarla, el brazo de la chica pasa delante del chico.



La mano de la chica, gira dentro de la mano del chico.


La indicación de la cadera es característica de esta vuelta.





  • Por detrás o por la derecha: Es la más fácil de indicar, ya que basta con dar un pequeño empuje a la chica y la rotación de las manos también es la más sencilla.

Vuelta por detrás, se llama asi porque el brazo derecho de la chica pasa por detrás de la cabeza del chico.




La chica no debe dejar caer el brazo que no sujeta el chico.
Lo más correcto, es re
cogerlo a la altura del pecho.






  • Hecha y deshecha o de derecha a izquierda: Es una vuelta combinada: primero se gira por la derecha y luego por el otro lado. Es la más fácil de realizar ya que no hay que girar las manos, que permanecen cogidas todo el tiempo.

CÓMO SE INDICAN

Tal y hemos visto anteriormente, todas las indicaciones se realizan con la mano derecha en la espalda de la chica mediante un ligero empujón que ha de ser seco y corto. Una vez realizado dejaremos el brazo en la misma posición aguardando a que la chica termine de girar para volver a armar la postura de baile.

Es muy importante no caer en la tentación de utilizar el otro brazo para indicar la vuelta o acelerarla. La chica realiza la vuelta sola. La parte del chico se limita a indicarle la dirección del giro y ayudarla a volver a "entrar" en el baile.

TECNICAS DE GIRO

Finalmente nos ocuparemos de las diversas técnicas de giro que puede utilizar la chica para ejecutar una vuelta. Existen multitud de maneras de realizar una vuelta y la chica deberá escoger una u otra en función del tipo de baile o de su habilidad. En cualquier caso, nos estamos refiriendo a técnicas de giro en el sitio, es decir sin desplazamiento.

Atendiendo al movimiento de los pies sobre el suelo hay 3 técnicas de giro principales: pirueta, vuelta apoyada y vuelta con pasos:

* Pirueta: Es la vuelta más típica. Se gira sobre un pie manteniendo el otro separado del suelo hasta que termina la vuelta, momento en el que se apoya.

* Vuelta apoyada: Como una pirueta pero el pie que no gira se apoya ligeramente y ayuda a mantener el equilibrio.

* Vuelta con pasos: Dependiendo del tipo de baile, al ejecutarla se mantiene el paso del mismo, adaptándolo al giro.

En cuanto al resto de gestos técnicos que acompañan la ejecución, los vamos a comentar por encima para ofrecer algunos consejos que pueden ser útiles a los principiantes.

En primer lugar hay que señalar la necesidad de mantener el cuerpo los más derecho posible en el momento de girar, para lo cual apretaremos fuertemente los glúteos e intentaremos "tirar" hacia arriba buscando un eje para la vuelta que se situaría justo encima de nuestra cabeza. La vuelta de la chica en el baile de salón siempre está metida en medio del baile así que tan importante como ejecutarla bien es poder realizar limpiamente el siguiente paso: date el impulso justo, si te impulsas más de lo necesario es más probable que te desequilibres.

El brazo que sujeta el chico por encima de la cabeza no se utiliza para nada en el giro pero el otro hay que mantenerlo recogido a la altura del pecho y puede servir para apoyarse si se sale trastabillado de la vuelta

miércoles, 19 de mayo de 2010

Girar en pareja

Girar o dar vueltas en pareja, es un movimiento esencial que se realiza en prácticamente todos los bailes. Si el avance frontal es entre los pasos principales el más difícil de indicar, la vuelta en pareja es sin duda el más difícil de realizar ya que necesita un alto grado de coordinación entre el chico y la chica y la contribución de ambos

Podemos definir el giro en pareja como una o varias vueltas que realizan los dos miembros de la pareja simultáneamente mientras están cogidos entre sí en la postura alta de baile. Al igual que en las vueltas de la chica, las vueltas en pareja pueden ser por la derecha o por la izquierda y la dirección del giro queda determinada por el hombro que retrocede. En ambas direcciones el movimiento que se realiza con los pies es similar y la dificultad la misma, si bien los novatos creen que es más difícil girar por la izquierda por una cuestión que analizaremos más adelante.


CÓMO MOVER LOS PIES

A partir de ahora todas las indicaciones que demos se referirán a las vueltas en pareja en el sitio (también es posible girar avanzando pero ese es otro problema y sabiendo hacerlo en el sitio no tiene mayor dificultad).

Lo primero que hay que tener en cuenta es que se pueden mover los pies de muchas formas diferentes para dar vueltas en pareja pero solo hay una buena para conseguir el doble objetivo de girar rápido y no desplazarse del lugar donde estamos: mover los dos pies alternativamente, uno hacia delante y el otro hacia atrás. Por supuesto estos movimientos "adelante y atrás" son teóricos. Nuestros pies sólo avanzan y retroceden con respecto a nosotros mismos de modo que permanecemos todo el tiempo en el mismo sitio. Lo único que cambia de girar por una dirección a hacerlo por la otra es el pie que "avanza" y la única razón de que mucha gente encuentre el giro por la izquierda "mucho" más difícil que el otro se debe a un problema estructural.

Colocación de los pies al girar



1º. El chico indica el giro con su pie izq. hacia delante.

2º. Como se puede ver, la apoya "por fuera" escoltando el de la chica.

3º. Ahora es la chica la que avanza con su pie izq. mientras el chico mueve hacia atrás el dcho.



4º.Observa que en todo momento los pies derechos de ambos están situados entre los de la pareja.
5º y 6º.
Chico y chica continúan "avanzando" sus pies alternativamente.

Como ya hemos dicho, los pies tienen que estar entrelazados al bailar así que uno de ellos (el derecho) queda situado en medio de los de la pareja. Cuando se gira por la derecha el pie que avanza es el izquierdo y como éste va "por fuera" todo el mundo lo mueve con más confianza. El problema es que en las vueltas por la izquierda hay que mover hacia delante el pie derecho y el riesgo de pisotón es mayor.

Objetivamente ambos giros son iguales pero a los bailarines que empiezan les parece más difícil el de la izquierda porque mueven el pie hacia delante con miedo o directamente no lo mueven en absoluto, dejando todo el peso del giro al otro (lo que en el argot se conoce como "cojear" o "hacer el patinete"). Si se mueven los dos pies por igual, la dificultad desaparece de golpe. Demostrar que se trata de una mera cuestión de confianza es sencillo: si practicas la técnica de movimiento de pies sin pareja, enseguida comprobarás que puedes girar exactamente igual por un lado u otro.

TIPOS DE GIRO Y TÉCNICA

Partiendo de la base de que los pies siempre se mueven de la manera que hemos descrito, la única diferencia sustancial entre distintos tipos de vueltas en pareja está en el ritmo o cadencia con que se mueven los pies. De acuerdo a ese criterio podemos dividirlas en dos categorías:

  • Vueltas continuas: Los pies pueden moverse al ritmo 1-2, 1-2 (merengue y pasodoble, por ejemplo) o 1-2-3, 1-2-3 (vals) pero su principal característica es que el movimiento de los pies es continuo, es decir, sin pausas.
  • Vueltas pausadas: No quiere decir que sean "lentas" sino que acumulan paradas dentro del propio giro. El movimiento de pies responde a una cadencia del tipo 1-2-3-pausa, 1-2-3-pausa.

Durante las pausas los pies no se mueven, si bien en algunos bailes hay un movimiento de cadera u otro gesto de "relleno". Este tipo de giros son los que se utilizan en todos los bailes de 4 tiempos que son la gran mayoría.

Por lo demás el resto de gestos técnicos que acompañan al giro son iguales en todas las vueltas en pareja. Para indicarlas el chico deberá empujar a la chica con su brazo derecho, con mayor fuerza si quiere girar más rápido. La chica contribuirá al éxito de la operación echando atrás su espalda para mantener la distancia entre ambos y ayudar a generar inercia.

Los pies de la pareja deben estar tanto más juntos cuanto más rápido sea el giro a realizar pero sin disminuir la distancia arriba. Con los pies bien pegados y el cuerpo lo bastante separado se genera el llamado "efecto peonza" que permite aprovechar la inercia de una vuelta para empezar la siguiente, lo que facilita enormemente los giros. La parte más difícil de las vueltas en pareja siempre es el arranque. Empezar el giro con un impulso inicial limpio es la mejor garantía de que salga bien.

sábado, 15 de mayo de 2010

Dirigir (2º parte)

Dejarse dirigir no es tan complicado como hacer las indicaciones pero también tiene sus dificultades. Si dirigir es una actitud mental, dejarse dirigir es ante todo una actitud física que consiste básicamente en mantener una disposición corporal que facilite una respuesta "automática" a las indicaciones del chico. Puesto que éstas llegarán a través de su mano derecha, la colocación de la espalda y brazo izquierdo de la chica serán decisivos para lograrlo. El resto es una mera cuestión de paciencia, de esperar a que lleguen (o no) las indicaciones. A menudo las chicas con mayor facilidad para el baile que sus parejas se exasperan cuando el chico no cambia de paso, acaban tomando la iniciativa pero eso es lo peor que pueden hacer si pretenden ayudar.

La parte del trabajo de la chica en la labor de dirigir se puede resumir en dos palabras: NO ADELANTARSE. Aunque en la fase de aprendizaje pueda llegar a ser muy frustrante, la mejor alternativa para llegar a bailar bien en el rol de la chica es esperar pacientemente a que lleguen las indicaciones antes de empezar cualquier movimiento e intentar no anticiparse jamás. Para la chica el baile es el arte de saber esperar.

COLOCACIÓN DE LA ESPALDA


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GRADO DE INCLINACIÓN DE LA ESPALDA
La espalda de la chica debe estar echada hacia atrás, buscando siempre el contacto con la mano del chico pero sin llegar a estar "tumbada". De las tres imágenes la única correcta es la 02. En la primera la espalda está curvada hacia delante y rehuye el contacto. La postura de la 03 es mejor pero es excesivamente rígida.






En la postura alta de baile todas las indicaciones le llegarán a la chica en forma de pequeños tirones o empujones en el costado y la espalda de modo que dependiendo de cómo la coloque, éstos serán más o menos efectivos.

Como principio básico señalaremos que la chica debe apoyar su espalda contra la mano derecha del chico haciendo un esfuerzo constante por echarse hacia detrás. No es posible bailar si hay aire entre la mano del chico y el costado y la espalda de la chica. Para evitarlo una bailarina debe "hacer fuerza" con su espalda, manteniendo siempre la distancia entre ella y su pareja. Si el chico tira de la chica hacia sí, será con el objeto de que avance, no para que se le pegue.

UNA RESPUESTA AUTOMATICA

Que haya que responder con rapidez a las indicaciones no quiere decir que la parte de la chica dependa de tener unos reflejos asombrosos. De hecho éstos no son necesarios en absoluto. Si la actitud física y la tensión de la espalda y brazo izquierdo de la chica son los adecuados, la respuesta a una indicación del chico debería ser automática, es decir inmediata, sin que sea necesario ningún tiempo de reacción.

Este "curioso fenómeno" se debe a que una vez adoptada la postura adecuada, es el cuerpo el que debe responder a los requerimientos del brazo de la pareja, sin reflexión ni tiempos de espera. El tronco y los brazos de la pareja forman un bloque indisoluble que se mueve de forma solidaria. Naturalmente para que esto ocurra, primero hay que repetir los mismos movimientos muchas veces, hasta conseguir mecanizarlos.

Una vez conseguido esto, la chica podría bailar relajadamente sin más preocupación que disfrutar de la música ya que las demás labores, como llevar el ritmo y cambiar de paso, le corresponden al chico. De hecho, en bailes cuyo paso básico es sencillo como el merengue o la cumbia, una chica que no haya recibido clases pero se deje llevar bien, puede hacer el 90% de los pasos que le indique un chico que sepa dirigir.

Truco

¿Qué ocurre si estás de pie tranquilamente y alguien te empuja de repente? Lo normal sería que salieras trastabillado pero no te caerías de bruces. Ahora supongamos que sabes que te van a empujar en algún momento... ¿Serviría de algo estar en tensión, esperando el empujón pero sin saber cuando llegará? Es dudoso y sería agotador. Este ejemplo ilustra a la perfección cómo debe afrontar la chica el baile: atenta pero relajada. Los empujones llegarán pero como no es posible saber cuándo, es inútil estar en tensión esperándolos. Basta con tener claro que cuando lleguen lo que hay que hacer es moverse, no caerse de bruces (que bailando equivale a tropezar con los pies de la pareja o propios por no responder automáticamente).

miércoles, 12 de mayo de 2010

Dirigir (1º parte)

Hay muchas formas de organizar el baile pero nuestro método se basa en que uno de los miembros de la pareja dirija y el otro se deje dirigir, porque creemos que es el mejor para aprender y tiene la ventaja de que facilita mucho bailar con gente que haya aprendido con otro sistema. A efectos de esto, partiremos del supuesto de que el que dirige siempre es el chico.

Aclarado esto, lo primero que hay que tener en cuenta para dirigir bien es que se trata ante todo de una actitud mental: no es posible dirigir unos ratos sí y otros no, hay que hacerlo todo el tiempo. Dirigir es muy dificil, requiere hacer un montón de pequeñas indicaciones con los brazos al mismo tiempo que se mueven los pies y tomar decisiones constantemente. Nosotros calculamos que la parte del chico es el doble de difícil que la de la chica, es decir que necesitará casi siempre el doble de tiempo para aprender los mismos pasos.

EMPUJAR Y DESEQUILIBRAR

El arte de dirigir consiste en empujar y desequilibrar a la pareja. Bailamos con los pies de modo que el 80% de las indicaciones consisten en "obligar" a la chica a llevar sus pies a determinados sitios. El otro 20% se refiere a las vueltas y enlaces de brazos pero de ellos nos ocuparemos en otros capítulos de este curso.

El truco para conseguir que la chica mueva un pie en la dirección que el chico quiere es empujarla cuando tiene el peso en el otro pie y está a punto de cambiarlo al que queremos que mueva, es decir cuando está desequilibrada. Si la chica tiene los dos pies firmemente asentados en el suelo la indicación no será efectiva. ¿Cómo se puede saber cuál es el momento adecuado? Fácil. Chico y chica se mueven simultáneamente, de modo que ella estará cambiando el peso de pie en el mismo momento que nosotros. con el brazo derecho

Los empujones han de ser secos y cortos. Su objetivo no es "mover" a la chica (se mueve ella sola) sino indicarle en qué dirección queremos que lo haga. La fuerza con la que se ha de empujar depende mucho del movimiento a realizar y de la "resistencia" de la pareja, entendiendo como tal el tiempo que tarda en reaccionar y empezar a moverse. En general, consideramos que es mejor que los principiante empujen con bastante fuerza puesto que tienen que acostumbrarse a dirigir y las chicas que están empezando también tardan más en responder. Con el tiempo hay que aspirar a que las indicaciones sean cada vez más sutiles y pequeñas. De hecho, en un bailarín avanzado éstas son tan suaves que pasan por "invisibles" a ojos de los espectadores.

SE INDICA SÓLO LO NECESARIO

No hace falta indicar todos los movimientos que se hagan. Como regla, consideramos que se deben indicar los que supongan un cambio con respecto a lo que estemos haciendo y los desplazamientos. Cualquier indicación debe pasar por estas tres fases:

  1. PENSAR LO QUE SE VA A HACER.
  2. INDICARSELO A LA PAREJA.
  3. HACERLO.

Por supuesto para un bailarín avanzado todo ese proceso es completamente automático y no tiene que pensar en ello pero al principio es bueno reflexionar un poco sobre el asunto. Lo más importante es el orden de los puntos 2 y 3: primero indicar, luego ejecutar. A menudo los principiantes olvidan hacer la indicación o pretenden hacerla al mismo tiempo que el movimiento, pero el momento oportuno siempre es antes de empezarlo.

Las indicaciones no tienen nada que ver con el movimiento que se va a hacer: una cosa es indicar y otra moverse. Esto puede parecer un tanto críptico pero tiene toda la lógica del mundo. A la hora de realizar un paso y su correspondiente indicación hay tres posibilidades: indicarlo y no moverse, moverse y no indicarlo y la única buena, indicarlo y luego moverse. Dirigir con decisión y confianza es la mejor forma de que bailar se convierta en una experiencia agradable y satisfactoria para los dos miembros de la pareja.



Truco

La indicación más dificil que hay con diferencia es la de avance frontal porque habría que tirar de la chica hacia atrás y no es posible hacerlo. Para indicarlo se recurre a un pequeño empujón en el costado con la palma de la mano al mismo tiempo que se liberan los dedos apoyados en la espalda pero lo más importante es la decisión con que se ejecute el movimiento de avance. De nada servirá una indicación perfecta si luego hacemos el paso de forma timorata y llena de dudas. ¡Si el chico no tiene claro lo que va a hacer, menos va a tenerlo ella! No se puede bailar con miedo. Recuerda siempre esta regla de oro: DESPUES DE INDICAR, AVANZA CON DECISION.


domingo, 9 de mayo de 2010

Como movernos

Bailar consiste en mover los pies al compás de la música. Bueno, los pies, las caderas, los hombros, la cabeza, las manos... pero sobre todo, los pies. Con ellos interpretamos la parte más esencial de la música: el ritmo. En principio la idea es muy sencilla: daremos un paso con cada pulsación rítmica, es decir nos moveremos rápido si la música lo es y lentamente en el caso contrario. Por supuesto no es tan fácil, también hay pausas (pulsaciones rítmicas en las que no nos movemos) y otras excepciones pero lo dicho nos servirá de guía por ahora.

La siguiente cuestión cae de cajón: ¿con qué pie empiezo y cuál muevo después? A partir de este punto, todo es opinable. Para no perder tiempo en hacer un compendio de todas las posibilidades que existen, nos limitaremos a exponer aquí los dos parámetros absolutos en que se basa nuestro método de aprendizaje y las razones que nos han llevado a preferirlos a otros.

Refiriéndonos siempre al baile de salón nos atendremos todo el tiempo a estas dos reglas:

  1. Los chicos empiezan todos los bailes con el pie izquierdo y la chica con el pie derecho.
  1. Una vez empezado el baile, los pies se mueven alternativamente, es decir, que si empiezas con el pie izquierdo a continuación toca mover el derecho, luego de nuevo el izquierdo y así sucesivamente.

Se ha decidido seguir estás sencillas normas por simplificar el aprendizaje restringiendo las posibilidades y por lógica: es mucho más fácil indicar los movimientos de inicio hacia la izquierda teniendo en cuenta cómo se coge la pareja.

Imaginémoslo, que empezamos el baile con el pie izquierdo y a partir de ahí movemos los dos alternativamente pero... ¿en qué dirección? ¡En todas! siempre que no nos estorben otros bailarines o nos encontremos con una pared, podemos movernos hacia cualquier lado. Pero no hay que preocuparse: no hay tantas posibilidades. En principio debemos considerar las cuatro direcciones básicas que marcan los puntos cardinales y que representan los movimientos frontales y laterales hacia delante, detrás, derecha e izquierda.

También existen las direcciones intermedias o diagonales y por supuesto se puede bailar o girar sin moverse del sitio. En cualquier caso y teniendo en cuenta que bailamos con los pies a ras de suelo, no son tantos los dibujos que podemos hacer con los pies...

Curiosamente esto no afecta en nada a la inmensa variedad de pasos de baile que existen porque lo que importa no es lo que dibujamos en el suelo sino cómo lo dibujamos, es decir la forma en que ejecutamos el paso. Por poner un ejemplo: hay pasos laterales en el merengue, el bolero, la bachata, el cha-cha-chá, el pasodoble, la rumba y otros bailes y en todos ellos se realiza el mismo dibujo en el suelo (una línea recta) sin embargo todos son completamente diferentes porque se ejecutan a distintas velocidades, así como acompañados o no de pausas, movimientos de cadera y otros detalles que le dan a cada uno un estilo propio y diferenciador.

En el baile de salón, todos los bailes se construyen a partir de un primer paso llamado básico que sirve de referencia para todos los demás. El sistema de aprendizaje es progresivo. Se empieza aprendiendo los primeros pasos y se acaba cuando conocemos varios pasos y somos capaces de combinarlos de distintas formas. El número de pasos de cada baile depende de su variedad musical, tradición, popularidad... Hay bailes que sólo tienen media docena de pasos y otros, cientos. En cualquier caso no dejes nunca que nadie te diga cómo se tiene que bailar determinado baile o qué pasos son los únicos que se pueden hacer en él. No hay una sola forma de bailar ningún baile. En este terreno todo es opinable. Otra cosa es que le guste a más gente y que llegue a hacerse popular y conocido.

La cuestión más fundamental que hay que tener en cuenta al realizar cualquier paso, es que los pies van a ras de suelo, es decir que no se despegan del mismo, salvo en raras ocasiones y siempre para ejecutar algún movimiento especial que en todo caso constituye una excepción.


TRUCO PARA NO PISAR A LA PAREJA

Hay un modo infalible de no pisar jamás a la pareja: No levantar los pies del suelo. Aunque esto pueda parecer una boberia, es sorprendente la cantidad de gente que no "cae" en ello. La técnica de apoyo que mejor puede servir a este propósito es muy sencilla: al dar un paso adelante, desliza la punta del zapato por el suelo manteniendo el peso en el pie retrasado, hasta asegurarte de que "no hay ningún peligro" y solo cambia el peso al pie avanzado y lleva el cuerpo.

jueves, 6 de mayo de 2010

Postura: Como colocarse a la hora de bailar (2º parte)

En la 1º parte, mencionamos de pasada que habían dos formas diferentes de cogerse para bailar: la postura alta o en pareja que se utiliza para la gran mayoría de los bailes y la baja (con los brazos abajo) de la que hablaremos en esta publicación. Algunos ritmos se bailan exclusivamente en la postura baja, otros permiten alternar entre ambas posturas a lo largo del baile y hay muchos que sólo utilizan la postura alta de brazos.

Hay muchas formas de cogerse con los brazos abajo y cada una de ellas facilita la indicación de determinados movimientos. Teniendo en cuenta que todas las posturas bajas tienen en común que la distancia entre los bailarines es mayor que en la postura alta y que la pareja ha de sujetarse por las manos para hacer las indicaciones de baile, hemos distinguido tres formas distintas de cogerse abajo:

  • Clásica o de gancho: Con los brazos caidos a lo largo del cuerpo, el chico flexiona los codos en ángulo recto, ofrece sus manos a la chica y ésta las pone encima. Los brazos de la pareja quedarían a la altura de las caderas aproximadamente. Ninguno de los dos aprieta la mano del otro sino que se sujetan mutuamente formando un "gancho" entre los dedos y la palma de la mano y tirando cada uno hacia sí. Los dedos pulgares no se utilizan para nada. Esta postura facilita la indicación de las vueltas de la chica y todo tipo de desplazamientos. Sin duda es la mejor forma de cogerse abajo.

  • Americana o con las palmas apoyadas: Esta postura es más versátil y estética pero no sirve para indicar muchos movimientos. Con las palmas de las manos apoyadas en las de la pareja, ambos deben empujar lo suficiente para que las manos no se despeguen en ningún momento. A menudo el chico tendrá que cambiar la posición de sus dedos con el objeto de hacer indicaciones y los brazos se pueden colocar a distintas alturas, así que no es una postura fija.

  • Cubana o cogiendo a la chica por las muñecas: Se utiliza sobre todo en los bailes caribeños. La chica levanta ambos brazos ante sí con el canto de la mano apuntando al frente y el chico las sujeta por las muñecas. Esta postura resulta muy tosca para bailar de frente a la pareja pero es perfecta para indicar movimientos cruzados por lo que suele combinarse con alguna de las otras. También sirve para indicar pasos laterales pero en ese caso hay que bajar las manos y empujar con los codos hacia fuera. El chico tiene una gran sensación de control cogiendo a la chica de esta manera.

Cada una de estas tres posturas bajas tiene su propia forma de girar las manos e indicar los pasos por lo que hemos decidido ocuparnos sólo de los aspectos técnicos de la postura clásica o de gancho. A partir ahora, todas las indicaciones que demos se referirán exclusivamente a esta forma de coger las manos.

EMPUJAR Y TIRAR

Cuando bailamos abajo no tenemos contacto con el cuerpo de la pareja como en la postura alta de modo que todas las indicaciones han de hacerse a través de los brazos. En principio el procedimiento para dirigir funciona exactamente igual: el chico intentará "obligar" a la chica a mover sus pies en determinadas direcciones mediante pequeños empujones o tirones de los brazos aprovechando el momento en que cambia el peso de pierna.

Para que las indicaciones del chico sean efectivas es imprescindible que ambos miembros de la pareja mantengan una cierta tensión en sus brazos. La regla de oro para bailar abajo es muy sencilla: los brazos ni se estiran ni se encogen. Por supuesto esto no quiere decir que haya que tenerlos completamente rígidos, de hecho necesitan cierto grado de flexibilidad. Simplemente significa que si el chico tira de la chica hacia sí es para que avance, no para que los estire.

VUELTAS, ENLACES Y ALGUNOS DESPLAZAMIENTOS

En la postura baja de baile la pareja apenas se desplaza por la pista aunque evolucionan el uno alrededor del otro y se intercambian la posición constantemente. El 90% de los movimientos que se hacen abajo son vueltas y enlaces de brazos, muy parecidos en todos los bailes si bien se realizan con distintos pasos y estilos.

En el momento en que la chica empieza a girar y sube los brazos por encima de la cabeza el chico ya no tiene ningún control sobre ella, de modo que es muy importante que antes de eso ocurra le haya indicado con claridad la dirección en que ha de moverse y el movimiento a realizar. Nunca intentes dirigir a la chica cuando los brazos ya están arriba. Aparte de que no se puede, pocas cosas hay más antiestéticas que las posiciones de brazos rígidas durante los giros. Recuerda: por debajo de la cabeza, brazos duros como piedras; por encima, blandos como chicle.

miércoles, 5 de mayo de 2010

Postura: Como colocarse a la hora de bailar (1º parte)

La postura de baile, es la posición que adoptamos cuando nos disponemos a iniciar cualquier baile. Hay dos posibilidades fundamentales: cogerse en pareja y con los brazos abajo o a la altura de las caderas. En este apartado, nos ocuparemos de la postura de baile en pareja.

Lo primero que hay que aclarar es que hay muchísimas maneras de cogerse en pareja. La que nosotros sugerimos, es la que nos parece mejor respecto a las demas, pero sólo es una opción, ¿de acuerdo? Las razones por las que nos hemos inclinado por esta postura en concreto son dos: está perfectamente diseñada para facilitar las indicaciones y puede adaptarse sin problemas a la mayoría de los bailes con pequeñas variaciones que comentaremos en su momento.





Postura de Baile
Lo que veis aqui, es un ejemplo de la postura Standard.








Detalles que hay que tener en cuenta
El pie derecho apunta al medio de los de su pareja.
La mano forma un ángulo de 90 grados entre el costado y la espalda.





Ten en cuenta que la postura de baile es muy importante. Aparte de que una postura correcta es estéticamente más atractiva, todos y cada uno de sus parámetros tienen un objeto y te ayudarán a resolver los diversos problemas que pueden surgir en la pista de baile. Estas son las tres cosas principales que debes tener en cuenta al colocarte en pareja:
  • No estamos exactamente enfrente de la pareja: Tanto el chico como la chica están ligeramente desplazados hacia su izquierda de tal modo que los pies en vez de estar enfrentados contra los de la pareja, están entrelazados.
  • La mano derecha se coloca entre el costado y la espalda: Aunque cruzar la mano en la espalda de la chica pueda dar la impresión de mayor "control" es mucho mejor colocar la mano con la palma apoyada en el costado y los dedos en la espalda, lo que facilita las indicaciones laterales y posibilita las frontales.
  • La actitud de la chica es la opisición: La chica es la encargada de mantener la distancia entre los bailarines ya que el chico no tiene otro remedio que tirar hacia si para hacer la mayoría de las indicaciones. La distancia se mantiene mediante un esfuerzo de oposición que se hace con la espalda, no con el brazo.

LOS BRAZOS TAMBIÉN BAILAN

Bailamos con los pies pero los movimientos se indican con los brazos, de ahí la importancia de éstos en el baile. Como norma general los brazos deben estar alzados a la altura de los hombros, con una flexión de codo suficiente para generar entre la pareja un espacio interior con forma ovalada. Manos, codos y hombros forman una línea recta vistos desde el lateral que será paralela al suelo, salvo que uno de los miembros de la pareja sea más alto que el otro en cuyo caso tendrá una ligera inclinación a favor de éste. Los codos apuntan hacia atrás y ambos brazos están a la misma altura.

El brazo izquierdo de la chica se apoya completamente sobre el derecho del chico tomando como referencia el codo del mismo, sobre el cual apoyará el suyo. Dependiendo de la longitud del brazo, la mano llegará más o menos cerca del cuello del chico. Contra lo que puede pensarse, que la chica deposite peso en ese brazo no resulta cansado para el chico porque a su vez lo tiene apoyado en el costado de la pareja; en cambio si se cuelga del otro acabará obligando al chico a bajarlo porque no es posible hacer fuerza hacia arriba con el brazo tan despegado del cuerpo durante mucho tiempo.

El brazo despegado del cuerpo sirve para hacer vueltas y poco más pero el otro es decisivo para el baile. Si la chica lo tiene correctamente apoyado en el del chico, sin que haya "aire", en el argot, no sólo facilita mucho las indicaciones sino que puede percibir muchos movimientos de la pareja aunque no se los indique, en particular los desplazamientos.

La actitud de los brazos nunca puede ser relajada si quieres utilizarlos para hacer indicaciones. Esto no quiere decir que haya que estar agarrotado, simplemente hay que tener un mínimo de tensión que aumentará en el momento de ejecutar un movimiento dificil de indicar y luego volverá a aflojarse. Al principio es posible que la postura te parezca rígida y te canses enseguida de mantenerla pero eso es debido al exceso de tensión y la falta de costumbre. Después de un tiempo tus músculos se adaptarán a ella y podrás mantenerla más tiempo. Por otra parte, no es una postura fija. Los bailarines avanzados la modifican todo el rato; desplazan la mano de la espalda, aumentan y reducen la distancia, suben el brazo para dar vueltas...

VARIACIONES DE LA POSTURA

Como hemos dicho más arriba, la postura de baile se puede enriquecer con pequeñas variaciones. Como la mayor parte de ellas tienen por objeto ayudar a la indicación de algún movimiento o paso, nos ocuparemos de ellas más adelante, no obstante, hay algunas que responden a razones estéticas o de sentido común, concretamente las que se refieren a la posición y altura del brazo derecho de la chica e izquierdo del chico.

Manteniendo invariable la regla de que los codos deben estar bien separados del cuerpo y aproximadamente a la altura de los hombros, el resto del brazo puede adoptar distintas extensiones que regularemos según nuestros gustos, lo que suene en ese momento o el espacio que haya en la pista de baile.

Por ejemplo, podemos colocar la mano más lejos del cuerpo en el vals y el pasodoble. Le va al estilo de estos bailes y las vueltas en pareja lucen más, en cambio, los bailes caribeños quedarían "raros" con el brazo tan extendido. Para bailar merengue y salsa es mejor llevar el codo más flexionado. Por otra parte, si estamos bailando en un pista completamente abarrotada de gente no tendremos otro remedio que adoptar esta última postura con la mano mucho más cerca del hombro, suene el baile que suene.

lunes, 3 de mayo de 2010

Saludos

Hola chicos/as, espero que les estes gustando mi blog, ya que lo estoy haciendo lo mejor que puedo para que podais aprender cositas del baile, como su historia, pasos, estilos, etc.
En las próximas entradas, añadire lecciones para mejorar la forma de bailar y en general, algunos temas de mi curso para que podais seguir aprendiendo, asi que no dejeis de visitarme eh!! jejeje


Un saludo.
Sheila

sábado, 1 de mayo de 2010

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